Desde que en 1946, Dª Ángeles Gutiérrez Suárez vendiera el edificio al Estado, reconvirtiendo su uso para oficinas, por sus bellos jardines han paseado desde los miembros de la Secretaría de Estado de Política Exterior hasta el director del Instituto Cervantes, que en 2008 decidió su traslado a la calle de Alcalá. Los componentes de la directiva de la patronal CEOE fueron sus últimos inquilinos. En 2015, el Estado vende el palacio a Pescaderías Coruñesas, su actual propietario.

Jardín de entrada con trazado circular

La entrada al Palacio de la Trinidad, cuyo nombre figura en una cartela cerámica bajo el tejadillo de madera de la portada, se realiza por la calle Francisco Silvela. Una vez traspasada la puerta, nos encontramos con un primer jardín de trazado circular, organizado en torno a un estanque polilobulado que se asienta en el centro y al que se accede por un pequeño tramo de escalera. En los laterales, pequeñas vías de tierra nos llevan hasta una decorativa pared de ladrillo con bancos de cerámica en su perímetro, revestidos con escenas de El Quijote.

El carácter semiurbano del Palacio y la consiguiente libertad para desarrollarlo a modo de gran casa de campo, permitió la realización de un jardín con un repertorio arbóreo muy variado. Así se puede apreciar en la trasera del muro perimetral de esta primera zona de jardín, presidida por un esbelto cedro, rodeado de un macizo de coníferas y frondosas a diferentes alturas.

A ambos lados de la amplia rampa que desemboca en la entrada principal al Palacio, podemos observar diferentes masas arbóreas agrupadas y dispuestas en línea ascendente, donde el color juega un papel importante en la composición, no solo en épocas de floración sino también durante todo el año: de ahí los contrastes estacionales que se pueden observar en este jardín. Algo de lo que podremos disfrutar a partir de la apertura de la Exposición, en plena época de floración.

Jardín cuadricular en alto

Junto a la fachada orientada al este se encuentra otra zona de jardín, con forma cuadricular, recorrido por caminos de losetas de gravilla, salpicado de esculturas en las esquinas, fuentes y bancos de cerámica. Los diferentes caminos describen unas isletas de forma regular, semicirculares, recubiertas con césped natural y, algunas de ellas, con plantas tapizantes.

Un detenido paseo por sus caminos de losetas, algunos cubiertos con pérgolas, te permitirá contemplar la variedad de especies –arbolado, masas arbustivas, trepadoras, flores– que se encuentran en los jardines de este mágico Palacio.

También, podrás descubrir las esculturas situadas en distintos puntos del jardín y coloridos bancos de cerámica. Incluso, podrás admirar un cenador en el ángulo de intersección de las vías públicas, levantado sobre pilares octogonales de piezas cerámicas verdes, rojas y blancas, con su gruta e imagen de la Virgen María en el centro de una escalera de doble ramal.

Desconocemos cuál será el destino final del Palacio de La Trinidad y sus jardines, pero lo que sí sabemos es que todos los participantes y visitantes de Casa Decor podrán disfrutar de estos fantásticos espacios durante las seis semanas de Exposición.

Fotos: Nacho Uribesalazar para Casa Decor 2024.

Palacio de La Trinidad
C/ Francisco Silvela, 82
(en la confluencia de María de Molina con Avenida de América)
Fechas de la Exposición: del 11 de abril al 26 de mayo de 2024